"Lo que dura un beso (con permiso del manto del apóstol)"
Un viernes más, el equipo de ADN nos ha lamido a sus fieles oyentes el sexo auditivo con la boca, la lengua y los labios. Y es que esta vez, con propiedad y sin riesgo a caer en lo mundano, se puede afirmar que Mariano Crespo ha mantenido con firmeza los argumentos de su introducción hasta el final, ajustando al asunto aquella máxima alterada de lo bueno y prolongado dos veces bueno.
Para ello, no ha tenido rubor, y sí mucha escuela de seducción, para implicar durante una hora a todo su equipo en el arte de la felación virtual, el cunnilingus incisivo o, incluso, un acompañamiento coral al maestro Alfaya (esta segunda voz a su “guajira africana” pasará a la historia junto al “volare” de Los lunes al sol o el “tan a gustito” del torero”).
Desde luego que preferimos su seso, pero quienes escuchamos el programa con el sexo ya convertido en carne y vociferando en hormonal corro alrededor del receptor, debemos conformarnos con una buena aproximación a la teoría: conocer en profundidad la valía y avatares de uno de los pioneros en el asunto (sino el mejor), de quienes acostumbran a hablar poco y estudiar mucho. No todo va a ser follar, claro.
Efigenio Amezúa, cual imagen gravitatoria testicular, nos deja las respuestas sobre el sexo colgando (“in the wind” como diría el cantautor). Julia Montejo nos brinda la esperanza a quienes creemos que la tara no es sólo el pesaje de nuestra pasión y un maestro de seducción, Luis Dorrego, nos equipara a las cebollas.
Es la esperanza que nos transmitió el equipo de ADN (tan eufórico que nadie nos creímos parte del problema y, menos, de la solución), “todos podemos atraernos, y no por el poder, sino por ser vulnerables”.
Esta vez, como siempre que hablamos de este programa, el acto duró 60 minutos y, aunque algunos digan que el sexo rápido ahorra tiempo, os recomiendo que escuchéis hasta el cenit pasando previamente por el éxtasis que, bien podría ser, lo que dura un beso.
Tomás Montero
BIBLIOGRAFÍA Y DISCOGRAFÍA DEL PROGRAMA
Música:
“Yo quiero ser muy promiscuo”, Ismael Serrano
“No todo va a ser follar”, Javier Krahe
“Soneto-oda al alpinismo de salón”, Guillermo Alonso del Real y José María Alfaya
“Prefiero tu seso”, José María Alfaya
Textos:
“Palabras para algo más que un dolor”, Luis Rosales
Maravillosa también la tertulia de después. Eso sí, el único que se fumó el cigarrillo de rigor fue Martín. El viernes que viene, al completo, espero.
ResponderEliminarRepito el mensaje de Lulú. Lo he tenido que borrar, porque contenía en la palabra "chicas", que encabezaba el comentario, un enlace a una página de sexo por webcam y saltaba todo tipo de publicidad sobre la misma.
ResponderEliminarLo siento, Lulú, pero tendré que transcribirlo yo de nuevo.
"Donde estaba yo metida? Ni conocía la web, ni por supuesto las entradas de radio que teneis.
Cierto que como dice Mariano el sexo hoy día está tan alcance de la mano como la decoración o la jardinería. Se ofrece como si fuera un chicle en un kiosco. Pero me quedo con lo que dice Laura sobre el enfoque de un sexo deshinibico de las mujeres, a la hora de hablar o de escribir.
Felicidades y un beso de Lulu"
Gana mucho el comentario con la aparición de Tomás Montero.
ResponderEliminarOswaldo